No sé si puedo escribir esto, es posible que sí, lo que no
sé es si en algún momento me gustaría releerlo.
Caí enferma el día 9, sin prueba, pero casi seguro el diagnóstico, por la Clínica como he aprendido en los últimos tiempos, pronóstico Covid 19. Leve,
eso sí. Jorge cae unos días después y termina finalmente ingresado. Han sido
dos semanas de angustia y ansiedad absoluta. Ahora comienza a estar mejor
aunque sigue ingresado. Un tipo grande, fuerte, no fumador, sin patologías
añadidas y sin embargo la neumonía bilateral ha sido demoledora. Sin olvidar la
situación de los hospitales, propia de un conflicto bélico o eso imagino desde un
mundo privilegiado y yo qué sabré. Prioridad: salvar vidas, el resto… nos
apañamos. Y si os digo que estaré eternamente agradecida al esfuerzo de los
sanitarios será poco. Ojalá que tras todo esto no volvamos a ser los imbéciles
que siempre fuimos y olvidemos la gratitud y el reconocimiento de aquellos que
salvaron una situación imposible e insólita. Ellos.
Algunas veces pienso
qué narices le pasa a mi vida, porqué me suceden tantas cosas, se lo digo a I.
conmigo no te aburres, soy la amiga más interesante que puedas tener. Me cago
en la hostia. Sigo creyendo que no hay dioses que marquen mi vida, ni karma que
lo fundó pero joer, una tregua no estaría mal.
No, nada de victimismos que son de lo más adictivo. Fuera.
Y si no me he vuelto loca me ha faltado poco, la soledad no
deseada me vuelve vulnerable -como a todos, que jodía- pero he echado mano de
todos mis recursos y se ve que tenía más de los que creía. He hablado con
gatos, con fotos, con una madre que lleva 20 años muerta y a la que he llegado
a entender tanto que me asustaba la similitud de nuestras vidas. He estado del
revés y con la cordura dando vueltas alrededor, rozándome y tranquilizándome,
esto no va a poder con nosotros. He imaginado mi vida sin J, una vida desolada
y dinamitada. He tirado de mi red de apoyo -bendita sea- hasta el hartazgo, les
he llorado, contado, asustado y tranquilizado. Me he reconciliado con la tecnología
y repudiado mi parte ludita -ingenua y arrogante eras- videoconferencias de ver caras y sonrisas, aquí
estamos. Y somos tú o lo intentamos.
Y sé que es sólo el comienzo, que mi punto de partida comenzará
cuando J vuelva, que quedará tanto por curar, por resolver, por ir viendo. Pero creo que no, lo siento, me cuesta confiar en nuestra especie, en su imbecilidad
congénita y en esa costumbre de cagarla una y otra vez. Pero me gustaría pensar
que todo esto pueda servir para algo. Ojalá. El sufrimiento colectivo nunca
debería ser gratuito, innecesario y fútil.
No debería serlo pero no sé yo.
Ojalá estéis todos bien. Mis abrazos.
8 comentarios:
Me alegro de que estés ya bien, y seguro que J, estará junto a ti en unos días. Gracias por contar tu experiencia... pesadilla, vivencia... Gracias.
Mil besitos.
Entiendo y comprendo muy bien por lo que has pasado.
Yo he estado bastante jodido aunque no me han hospitalizado... sigo sin saber lo que tengo, sí que sé las consecuencias de lo que pillé que podían haber sido irreversibles.
Me indigno cuando veo lo fácil que resultan hacerse los tests a algunos personajes de la política que siempre han defendido la sanidad pública, y bla, bla, bla... para mí han quedado retratados para siempre... de los otros ya lo imaginaba pero de estos tan solidarios y demás...
En fin, que se mejore J y tened mucha paciencia, este virus es de larga recuperación y más con neumonía, por desgracia lo sé muy bien.
Besos.
Gracias, Auroratris, era una terapia más que un escrito... gracias a ti por estar ahí. Besos!
Joer, Javi, no me digas! cuídate mucho, por favor. Y sí, sé lo lenta que es la recuperación... paciencia como tú dices. Me pasaré a ver que sigues bien por tu cueva. Un abrazote!!! (me encanta tu último poema, no puedo estar más de acuerdo)
Marga!, espero, no!!, deseo que estés bien y que Jorge siga mejorando y vuelva pronto a casa. Lo siento, mi niña, siento que hayas pasado por esto. La verdad es que he pensado varias veces en ti en este tiempo horroroso, pero solo pensando cómo estarías con todo esto, ni por asomo que te hubiera "tocado". Porque esto es así, una lotería.
Ya verás como tu ánimo, el personal, mejora en cuanto J esté en casa. El otro, podríamos llamarlo, social, ese me temo que como dependa de los que están a cargo de nuestra política, lo veo difícil de recuperar. Yo cada día estoy mas indignada y asqueada.
Cuídate muchísimo, y espero que en nada, escribas diciendo que ya estás con J!!!!!
Un beso enorme, y otro, y otro ...... de verdad que .... eso cuídate mucho, que te quiero mucho!!!
Ojalá todo pase pronto y con un gran final, de esos felices de Hollywood que tan poco me gustan pero que por una vez no me importaría en absoluta contemplar: una calle llena de vecinos que de repente se ponen a cantar y a bailar aunque nadie les haya enseñado ni la letra de la canción ni la coreografía del baile.
¡Fuerza!
Un abrazo.
Hola!!
Sí, Jorge ya mucho mejor, el peligro ha pasado y queda una recuperación con paciencia y calma. Ahora estamos en la fase de qué hacer cuando le den el alta, que no será inminente, pero ver qué hacer si yo soy positivo como creo y cómo pasar el aislamiento de 15 días al que está obligado. En fin, todo esto es un lío de aupa y me ayuda el hecho de tener un familiar médico que nos guía un poco pero desconcertante es poco.
Todo tan insólito y raro... ¿verdad?
Carmela, besos y abrazos a gogó!! gracias, preciosa.
Licantropunk, me has hecho reir imaginando esa escena "pastelera" que tampoco sería de mi agrado cinematográfico pero... eso, molaría.
Gracias por estar ahí, os voy contando.
Hola, Marga! Os deseo lo mejor para ti y Jorge. Ánimo, saldremos de esta. Yo voy tirando trabajando desde casa y paseando el perro de un vecino minusválido, aunque ya no sé si es el perro el que me pasea a mí.
Un beso virtual pero sin mascarilla.
Borgo.
Gracias, Borgo!
Así estamos en estos tiempos desconcertantes, no sabemos quien pasea a quién...
Cuídate y sigue tirando, no es mala opción.
Un beso grande
Publicar un comentario