miércoles, 1 de junio de 2016

Solo es querer

Como es nuestra costumbre hubo un día de jugar a las escondidas. Hubo un día en el que el pacto era nadie a un lado y al otro los dos. Y al llegar la noche habíamos adquirido tanta práctica y era tanto el regocijo que ni contestábamos las llamadas y los móviles parecían peces dentro de una red, boqueando sobre la mesa. Y era fácil ignorarlos.




Luego contemplamos el botín del día y desmemoriados de lenguaje, entre signos y balbuceos propios, corrimos a acostarnos por no seguir existiendo para los otros.

(Si tengo tiempo os iré contando en qué quedó el botín; me da que más de uno merecerá la pena o eso espero).

9 comentarios:

El peletero dijo...

Yo me quedo, como mínimo, el de la guerra, el de los centauros del desierto y el de los comanches. Al menos para empezar y hacer boca.

Ya me dirá que tal están.

Besos de guerrero comanche.

Marga dijo...

Peletero, jajaja, esos son del botín de Jorge aunque al final acaban siendo compartidos, claro. Se está leyendo ya el de Centauros de desierto y dice que es genial... la película la vimos hace poco pero dice que el libro es mucho más duro.

¡Besos jaú!

TORO SALVAJE dijo...

Vale... ya está... ya los he apuntado en la lista de "NO LEER JAMÁS"...

Gracias cielo.

Besos.

Carmela dijo...

jajajajjaa me río del comentario de Toro.
Las cosas que perdimos en el fuego, es el siguiente que tengo en lista...quien lo lea antes que...no cuente jajajaja.
Besos, me alegra verte :))

Licantropunk dijo...

¿Vinieron los Reyes Magos ya? Y yo sin enterarme.
Saludos.

Marga dijo...

Torito, para una vez que maté un perro... desconfiado!
De nada, nube.
Besos!

Carmela, he empezado por él y está genial... sólo que yo soy una cagona y me está dando un miedito que... jajajaja. Pero escribe de aupa la tal Enriquez.

Calla, que os tengo de abandonados pero es que no me da la vida más de sí. Pero os pienso, jeje.
Besos!

Licantropunk, casi, casi, jajaja. Y mejor que los Reyes porque está genial que te regalen libros pero como el regalárselos uno mismo no hay nada.
Saludos.

Anónimo dijo...

Qué envidia sana hacia tan jugoso botín, querida, querida Marga... ¡Madre mía lo que nos queda por leer! ¡Y qué bueno poder escribirlo y proclamarlo a voces! ¡Y descubrir cada día que quedan muchos tesoros que tienen que ver nuestros ojos...!¡Y desear continuamente vencer a los hombres grises de Momo y recuperar tiempo y tiempo para leer y leer! Ya nos irás contando.

Beso
Hildy

Marga dijo...

Hildy, pues sí, qué gozada saber lo que nos queda por leer y proclamarlo, jajaja.

Lo del tiempo... bueno, llegarán tiempos mejores y tendremos más, ays. Cada vez se me complica más su falta.

Ya estás de vuelta?

Besotes!

miquel zueras dijo...

Es verdad, la película "Centauros del desierto" no esta mal (yo creo que sobrevalorada, por el bajón de su segunda mitad) pero el libro sí que es muy recomendable.
El reparto del botín se ha de hacer como los piratas, con ron o unas copas de caipirinha.
Saludos!
Borgo.