domingo, 9 de enero de 2011

Inicios

Andar con pies de plomo nunca fue lo mío, soy una metepatas de antología. Debe ser por elegir el buceo a la superficie y por ello mismo no respirar demasiado antes de soltar el lastre de mis pensamientos, todo oxígeno bajo el agua es un bien muy preciado. Será por eso.



El caso es que - sin intentarlo con ahínco porque el azar suele elegir por cualquiera de nosotros a pesar de que el miedo a que así sea nos invite a obviarlo- decidí empezar el año de buena manera. El primer fin de semana ya sin obligaciones vestidas de fiesta ha surgido por sí solo pero ojalá fuera el antecedente de lo que nos espera.


Comencé leyendo Al Este del Edén de Steinbeck, una buena historia mejor escrita y entre comienzos del siglo XX dejo volar la imaginación y las pocas comparaciones que se pueden dar con un tiempo que no es el nuestro. Me gusta la forma de expresar la conciencia de sus personajes en él y sus tramas entrelazadas.

La primera visita al cine: También la lluvia. Si tenéis ocasión no os la perdáis. Es tan veraz, con un guión asentado y una realización tan ajustada a la historia que a pesar de ser cine español no lo parece ni por asomo. Cada cual tiene sus gustos y el cine español cojea en los míos. Además de ser rentable, como pide el insigne presidente de la Academia, Alex de la Iglesia, no estaría de más que también fuera interesante. Sé de aquello de que nadie es profeta en su tierra pero en este caso no es más que el quejido de un victimismo que me cansa. A ver si Daniel Sánchez Arévalo, próximamente de estreno, consigue que al menos dos películas, de todas las que me esperan este año, se encuentren entre las preferidas por mí. Sería una buena media nunca conseguida hasta ahora. A pesar de mi insistencia acudiendo a las salas de cine para ser defraudada.

Y por último, una mañana lluviosa, bajo paraguas a tres euros que dejan filtrar el agua y una crisis ajena a unos emigrantes perdidos como nosotros ante las dentelladas del capital. Botas empapadas y risas. La primera salida a comprar libros en la Cuesta de Moyano. Yo te regalo, tú me regalas y este apto para compartir. Tres libros que tendrán que esperar en el montón acumulado y mis falsas promesas de hasta dentro de dos meses no compro más, palabrita.

Nada nuevo si no fuera por la coincidencia de ser los primeros días del año y ya por fin vestidos con la tranquilidad y el placer de poder dedicarlos a aquello con lo que disfrutamos de veras. Nuestro tiempo de ocio que, definido por mi admirado Ambrose Bierce en el Diccionario del Diablo, es el intervalo de lucidez en una vida desarreglada. No se me ocurre mejor definición.


13 comentarios:

TORO SALVAJE dijo...

Me apunto la peli.
Al Este del Edén me cautivó de principio a fin.

Que siga el año así de bien.

Besos.

EG dijo...

no ví la película y no leí el libro, serán cuentas pendientes para este año. Gracias! y que sigan los descubrimientos!

Carmela dijo...

Demasiado barullo y situaciones poco propensas para el cine o la lectura, pero poco a poco volvemos a la rutina. Me apunto libro y peli.
Besos

Magnolio dijo...

De la guerra de la lluvia, bueno, de la peli, me quedo con el indio: a Juan Carlos Aduvi que le den el Goya, el Oscar y la zambomba,por supuestísimo, pero yo me quedo con el indio, el de Colón, el de verdad.

Con Steinbeck en cambio va a ser que no, me lo hicieron leer las monjas ("La Perla") y aún le tengo en el cuarto oscuro, por malo, jajaja.

Del resto:lecturas mías, tuyas, compartidas, mailearemos ¿a qué si?

Muá.

Jenn Díaz dijo...

Qué maravilla leerte, Margot. Hables de lo que hables. Maga, loca, hermosa.

Marga dijo...

Toro, a mí también me tiene cautivada...
Y que siga, acabamos de empezar, no? daremos el beneficio de la duda a este año...
Besotes!

Emmagunts, que sigan pues!

Carmela, bendita rutina si es placentera, y como se la echa de menos entre el trajín.
Besos!

Magnolio, con todos me quedo, que ayer era hoy y tendemos a olvidarlo. Por eso me gustó la peli, recapacitar sobre el descabale moral que nos habita: el ayer me indigna y me mueve, y el hoy... vale, te miro y poco más, pero si no tocas mis intereses que ese es el límite de tu lucha que nunca fue mía. Tan endeble todo, ays. Excepto el papel que interpreta Jarra, el único firme en sus convicciones y tan cínico parece, tal vez porque no tiene nada que perder? pues sí que sí... así.
Y sí, algo a compartir, cómo no? un año más, ummm.
Abrazo que va.

Fusa mía! la maravilla es irte viendo por aquí... cucú, tras-tras!
Locuras y delirios a compartir, de eso también sabes lo tuyo y pardiez que bien me saben al leerte.
Un beso te lanzo

Licantropunk dijo...

"También la lluvia" espero que sea mi reconciliación con el cine español. Porque la veré, fijo que sí.
Saludos.

Antígona dijo...

Niña Marga, ¿por qué no debería ser el antecedente de lo que os espera? Todo es cuestión de quererlo, sean cuales sean las circunstancias que vengan. Y, es cierto, de un pelín de buena fortuna, para qué vamos a negarlo ;)

Leí con auténtico deleite “Las uvas de la ira”, así que le reservo un hueco en mi pila de libros a “Al este del Edén”. Y a lo mejor lo adelanto unas cuantas posiciones, recordando lo que me hizo disfrutar y me conmovió aquel.

“También la lluvia” está igualmente en mi lista de disfrutes pendientes. No he oído un mal comentario de ella, aunque está claro que, desde determinados sectores, la ausencia de una mala crítica no tiene por qué ser de fiar. Pero sí me fío de Iciar Bollaín y más aún de ti, declarando, como declaras, que el cine español no es ni de lejos lo tuyo.

Genial esa frase de Ambrose Bierce. Es cierto que sólo los momentos de ocio representan un lugar de vuelta a sí mismo y de decisión lúcida en medio de tanta obligación impuesta y enajenante. Ay, no sabes cómo echo de menos estos días un pelín de esa lucidez. A este paso ni cuando llegue el fin de semana lo encuentro. Dios, qué ganas de jubilarme ya.

Me alegro de que hayas empezado el año con tanto acierto. ¡Que sigas en racha!

Besos desarreglados!

Marga dijo...

Licantropunk, ya sabes que pasa con esto de recomendar, da un poco de miedo pero... sí, me da que te gustará. Es una película digna, dignamente hecha, me refiero, y eso es mucho en nuestro cine, ya sabes.
Ya me contarás...

Antígona muá, ummm, sí, un poco de fortuna, jajaja.
Al Este del Edén embebe tanto como Las uvas de la ira, de otra forma pero te lleva igual. Asi que si disfrutaste con el otro no dudo que este te gustará.
Y la Bollain siempre me ha gustado (será por aquello de ser de las pocas mujeres directoras de este país que me cuenta cosas que me interesan) pero en esta, a mi entender, ha dejado una película redonda que no me chirría por ningún lado. Tan humanos y patéticos sus personajes, tan como todos.
Algún día pondré por aquí más definiciones de Bierce y su diccionario, es la caña el tipo, te encantarán, ya verás... jajaja. En cuanto a la jubilación.... menudo temita para mencionar, no? jeje.
Que la racha sea de ida y vuelta y que las dos nos lo contemos!
Besos panza arriba!

xnem dijo...

Dos meses! Yo si lo consiguiera pordría pasar DOS AÑOS sin comprar, o mas. La verdad es que siempre se encuentra algo que apetece mas, o algo que ha aparecido ya y uno no se puede resistir y la pila se va agrandando.

Ui! cuando menos te lo esperas sale un indio tras un matorral, pero veo que es su barrio son como los zombies!

Tomás Serrano dijo...

Eliges siempre una fotos impactantes...
Respecto a las recomendaciones, otra vez vestido de harapos que no de tranquilidad, me temo que no tendré tiempo para Steinbeck (he empezado "El manantial" y es larga larga) ni de películas españolas...

Marga dijo...

Xnem, y si me dedico a releer (que de vez en cuando hago) tendría para otros cinco... jajaja. Pero sí, siempre hay algo que apetece, dependiendo del momento...
La que hace el indio soy yo pero es que me gusta... jeje.

Tomás, sí, procuro hacerlo al menos. La imagen asienta lo dicho, qué te voy a contar!!
Aunque me gustan más tus ilustraciones, no es peloteo, eim? coñe, es que son fantásticas! y propias, ays. Nada que ver.
El manantial? lo busco que la desconozco.

Darío dijo...

Esun buen comienzo y que siga así, que no se desbarranque el año...